Me siento cada día más miserable.
Soy una artista, o un trapo de piso.
Salgo a caminar y todos los perros y los gatos vienen a saludarme. Me sonríen los niños, las chicas me dicen que seamos amigas. Los varones me acechan.
A donde iría con la tristeza que me pesa y me nubla la visión.
Quién hará realidad mis sueños si me siento tan triste que podría vomitar mi propio corazón.
Hicieron de mí un pozo. Una víctima.
Tantos años me mantuve optimista. Ya no aguanto más.
Ya no aguanto más.
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